Racismo, xenofobia, hablemos sin hipocresía

Hay muchas maneras para determinar si usted es o tiene algún grado de conducta en su proceder racista, odio, repugnancia u hostilidad hacia las personas negras o los extranjeros en Puerto Rico.

En esta isla donde la mayoría de su gente muy bien le cae el dicho de “si no tiene dinga tiene mandinga”, o en algún momento de su vida puede que se haya expresado de alguna manera diciendo: hay, “es negro o negra pero tiene el corazón blanco”, o “es negrito o negrita pero tiene facción de blanco o blanca, o “es negro o negra pero es decente”, o se ha tirado un mal chiste sobre la raza negra o de alguna persona extranjera, o muchas veces, aquellos que tienen el pelo rizo hasta lo más profundo de sus raíces lo disimulan con un “papazo”, o sea con un alisado.  Si, o aquel padre de la raza negra que le aconseja a su hijo o hija, “cásate con un hombre o mujer blanca para que mejores la raza”.  Esto son algunos de tantas expresiones y actos que mucho hemos dicho o hecho en algún momento de nuestras vidas.

Dentro de todo este meollo xenofóbico boricua, surge unas posiciones que están preñadas de hipocresía.  Yo le digo a estos puristas enfermizos que antes de señalar se aseguren de que sus manos estén limpias.  Por favor, yo seré pecador pero no veo santos a mi alrededor. 

Hay mucho espacio para mejorar, claro que sí y pedir perdón. Pero, por si acaso, tengo muchas piedras en mi casa para aquellos que se sientan libres de pecado para que tiren la primera piedra. Juan 8,7.  

Mea culpa

Nuestro país vive un momento de intensa crisis económica, política y social.  Esta situación no se da en un vacío y hasta tanto no seamos valiente al reconocer de que todos hemos contribuido a este desastre, hasta tanto no logremos salir de la colectiva inmadurez política y social que vivimos, hasta que no se reconozca, bendito, jamás se encontrará el camino correcto hacia la solución de nuestros problemas, Mea, culpa, claro que si.  

Un paso por cada lágrima

Ricky RENUNCIA, Ricky RENUNCIA, Ricky RENUNCIA.

Durante el verano del 2019 un pueblo indignado, Puerto Rico, se tiró a la calle y marchó, y marchó por muchas razones, sobre todo la juventud borícua que, bandera en mano, dijo presente para defender su dignidad, respeto, y a defender su derecho democrático a expresarse, por estas razones muchas lágrimas brotaron.

Política, el tiro y la culata

Interesante la Política, los políticos y los analistas que son políticos.  A veces van por Lana y salen “transquilao” o simplemente “le sale el Tiro por la Culata”.

Buscón o Buscona

Buscón o Buscana – «una persona que hurta rateramente o estafa con socalina» o sea, con maña, con astucia. Diccionario de la Lengua Española.

Su alcance no tiene frontera, los ha habido siempre a través de la historia de la humanidad. Los hay en cualquier lugar, país, región, pueblo, barrios, los y las hay en cualquier círculo social y en la administración pública ni se diga. No se engañe, los hay en los negocios y hasta en la sociedad religiosa, son hipócritas y muchas veces actúan disfrazados con traje de oveja mansa.

El buscón o buscona, siempre buscando a quién estafar.

Evitemos la costumbre de la desesperanza

La desesperanza sí tiene esperanza.

Sobran las excusas, los análisis y las explicaciones para justificar acerca de cómo llegamos dónde estamos. 

Aun cuando todos hemos contribuido al desastre y todos queremos que se resuelva, lo cierto es que existen sectores que no quieren asumir sus responsabilidades.  No, no, no, así no es.

La composición social del Puerto Rico de hoy es de una sociedad madura, es grande, y compuesta por muchos trabajadores que luchan de día a día por lograr echar hacia adelante aun con todos los obstáculos que se le presentan.  Cuando digo trabajadores lo digo desde la perspectiva más amplia, de la que lleva la carga con mucho sacrificio en este país.  A modo de ejemplo de aquel y aquella que se levanta temprano para ir a su empleo en una tienda, a su puesto para recoger los desperdicios sólidos, para el taller de mecánica, para recoger café y frutas menores, aquel y aquella que tiene su guaguita para vender tripletas, pichos, alcapurrias, para cocinar en un restaurante, a lavar carro, limpiar zapatos, limpiar las calles, de mensajeros, choferes, los artistas que nos regalan su talento por casi nada, los obreros de la construcción, albañiles, carpinteros, las enfermeras, las y los trabajadores a domicilio, las abuelas que cuidan a sus nietos para que sus padres traigan el pan a sus casas, a las que buscan sus nietos a las escuelas, las y los educadores, oficinistas, secretarias, contables, asistentes médicos, técnicos de laboratorios, muchos y muchos más, claro que sí, trabajadores. 

Hay además profesionistas que la están pasando difícil, ellos también son trabajadores.  Están también los que han perdido sus empleos, las familias que han perdido sus hogares a causa de los huracanes, terremoto, el COVID-19.  De otra parte nuestros jóvenes no logran las oportunidades para su desarrollo y deciden marcharse hacia otras tierras, principalmente hacia los Estados Unido.  Todos ellos tienen algo en común, ya van por comerse el segundo cable porque el primero ya se les fue hasta lo más profundo de sus entrañas. 

Nuestra sociedad, la de todos, se va ahogando en un sentido profundo de impotencia por lo que debemos de actuar hacia la contribución individual para evitar acostumbrarnos a la desesperanza. 

Todos tenemos algo nuevo que aportar

Foto por: Iván Gonzalo Ortiz

Por múltiples razones Puerto Rico ha perdido su capacidad de crecimiento económico, de hecho, en la actualidad se está corriendo el país sin un modelo económico significativo.  La improvisación es la norma, mientras tanto el deterioro económico y social es evidente.  El país se nos va barranco abajo y en nuestras propias narices.   Para salir de este atascamiento hay que caminar más allá del horizonte, señores lo que hay ya no sirve, punto.

Tenemos que reforzar, con valentía y confianza, las capacidades de pensar, pensar en un nuevo Puerto Rico, pensar en la capacidad de producción, en la capacidad de la innovación; en la educación y trabajo para todos, esa es la clave. 

Para lograrlo necesitamos aprender a gobernarnos a nosotros mismos.  Se ha fallado, ya por muchos años, en la Administración Pública, en la Gerencia Gubernamental efectiva que además de no lograr los objetivos básicos para el pueblo, esa deficiencia nos cuesta muchos millones de dólares.  Se ahogan con facilidad en un en vaso de agua.  El futuro está en nuestras propias manos, en la UNION.  Confío en mi pueblo y estoy seguro de que todos tenemos algo valioso que aportar. 

Atletismo borícua, porque si nadie los recuerda, desaparecen…

El atletismo puertorriqueño comienza a dar sus primeros pasos al principio del siglo pasado, siglo XX.  En la década de 1910 y poco antes de surgir la Liga Atlética Interuniversitaria (LAI) participaban entre sí las escuelas y a un nivel más alto algunas escuelas superiores e instituciones universitarias.

La pasión, rivalidad y fogosidad era evidente entre la Central High de Santurce, la Universidad de Puerto Rico de Rio Piedras, el CAAM de Mayagüez, el Instituto Politécnico de San Germán y otras instituciones y escuelas de las cuales se destacó también la “Boys Charity School”, escuela de niños y jóvenes desventajados.  Esta última localizada justo en la Parada 19 en la Ave. Ponce de León de Santurce, cuyo edificio cede de esta institución luego pasó a ser las oficinas centrales del Departamento de Salud.

Al parecer la década de los años veinte muestra los signos claros y definitivos para establecer el comienzo del florecimiento del atletismo en Puerto Rico.  Fue una época importante pero poco conocida por la falta de cobertura de prensa.  La mayoría del pueblo no sabía leer y escribir, situación muy normal para esa época.  En ese entonces era muy común que los eventos noticiosos se conocieran mediante los comentarios entre la gente, o sea, de boca en boca.  No fue hasta mediados de la década de los años treinta que surgió una sección deportiva en el periódico El Mundo y la primera participación de Puerto Rico en los juegos Centroamericanos y del Caribe fue en el 1930.

A través de la historia la humanidad ha recorrido muchos senderos dejando profundas huellas al caminar que asombra y trasciende a través de los años.  La historia del atletismo no es la excepción, hace un siglo atrás hombres y mujeres sembraron con sus gestas fuertes raíces para contribuir hacia el desarrollo del atletismo puertorriqueños, pero ¿dónde están?, ¿quiénes fueron?

No hay duda, el guardián más severo es la historia y ella nos emplaza.  Nos coloca a todos, a la generación actual y a las venideras en una posición de reto para honrar a quienes nos sirvieron a través de sus positivas ejecutorias en el atletismo, aunque haya pasado un siglo.  Se trata de una época poco documentada la cual debemos de examinar y entender en su justa perspectiva de tiempo y espacio.

Estamos en el comienzo de una nueva década, 2020, año que marcará un siglo después de la gesta de aquellos jóvenes atletas de entonces que trazaron la ruta y los caminos del atletismo borícua.

Es un momento de reflexionar, vayamos, busquemos, historiadores del deporte, cronistas deportivos, investigadores universitarios de la historia de nuestro país, vayamos, busquemos, porque en algún lugar o en el fondo de un viejo baúl habrá alguna reseña, algún escrito que pueda servir de apoyo para traerlos de vuelta a los olvidados del atletismo borícua, porque si nadie los recuerda, desaparecen.  

La restauración de las 936 en Puerto Rico

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La sección 936 fue legislada por el Congreso de los Estados Unidos en el año 1976 y cayó, como dirían por ahí, “como anillo al dedo”.  En la década de los años setenta la economía en Puerto Rico no arrancaba ya que previo a estos años había transcurrido un período de recesión.

El impacto positivo de la sección 936 llevó a la creación de sobre 165,000 empleos directos.  Fue la causa que produjo mantener aproximadamente sobre 12 billones de dólares en la Banca local.  Se produjo además otros 150,000 empleos indirectos.  Tuvo un impacto positivo en el sector financiero y en la manufactura.  Las importaciones y exportaciones ascendieron a más de 20 billones de dólares.

De otra parte, durante todo el crecimiento económico producido por las 936 se registró un mejoramiento en el segmento social en la isla.  Hubo avances en el cuidado médico, se alargó la expectativa de vida, se produjo una provisión de mejor vivienda y se consolidó la clase media del país.

En el año 1996 el Congreso derogó las 936.  Desde ese año la economía de Puerto Rico comenzó a resbalar, cayendo desde el 2005 en una recesión hasta el presente (2020).

En los últimos meses y tras los problemas causado por la pandémia del COVID-19 en los Estados Unidos y el mundo, el Congreso está considerando, más rápido de lo que imaginamos, volver a restaurar un modelo similar a la Sección 936.  Esto permitirá que las empresas farmacéuticas consideren ubicarse nuevamente en la isla, lo que supone una excelente oportunidad para el desarrollo de nuestra economía.

¿Habrá consenso en la isla sobre este tema?  Yo comparto la opinión de que este posible nuevo modelo económico en la isla se ajusta a cualquier ideología, la Estadidad, Independencia o Libre Asociación.  De existir esta posibilidad, por favor vamos a remar todos juntos para que se construya un nuevo modelo económico, justo y duradero para el beneficio de todos.    

Más allá del dogma político que nos asfixia todos los días en nuestro país.  Cuénteme, ¿Cuál es su parecer sobre esta posibilidad?

Fundación Nacional para la Cultura Popular – Entrevista al Director Ejecutivo

“Como siempre, con muchos planes hacia el futuro, claro que sí”.  Esta fueron las expresiones y pronta respuesta recibida del Director Ejecutivo de la Fundación Nacional para la Cultura Popular, Javier Santiago Gonzalez.

La Fundación es una entidad sin fines de lucro y se presta, Agosto 2020, a celebrar sus 24 años operando continuamente a favor de la protección y respaldo dirigido hacia el estudio, la promoción y el auspicio de eventos de interés cultural de los artistas puertorriqueños.

Durante estas dos décadas y media la Fundación no sólo llenó un gran vacío en lo que respecta a la investigación y divulgación de la música de los compositores puertorriqueños.  Con mucho éxito y reconocimiento internacional ha logrado poner a la disposición pública uno de los archivos más anhelados por cualquier país, el archivo de los inmortales de las bellas artes.  En su página cibernética se puede encontrar casi 800 biografías con su respectiva contribución de aquellos artistas, cantantes, compositores, actores, actrices, escritores, periodistas, directores y productores de cines, de teatro, de aquellas y de aquellos que se destacaron y aportaron a la construcción de la herencia cultural de Puerto Rico.

“Han sido muchos años de continuo esfuerzo.  Hemos respaldado además producciones fílmicas que han contribuido con éxito hacia la documentación histórica de la trayectoria de los eventos más relevantes del país”, expresó Javier con gran satisfacción y orgullo.

La Fundación además guarda una extensa colección de discos en todos sus formatos, grabaciones de radio, entrevistas, fotos, negativos, videos en diversos formatos, propaganda publicitaria, revistas, obras de arte, cuadros y otros objetos de colección.

De cara hacia el futuro la Fundación habrá de compartir próximamente la producción artística de la cantante Chabela Rodríguez, titulada Semilla de la Nueva Canción. De otra parte, muy pronto saldrá la producción cinematográfica, respaldada también por la Fundación, 3,000.  Esta producción fílmica del cineasta Skip Font, trata sobre el famoso pelotero Roberto Clemente la cual es protagonizada por el actor puertorriqueño Modesto Lacén. 

Es importante además comentar que ya se encuentra en pleno desarrollo la construcción de la Biblioteca de la Fundación cuya inauguración se proyecta para el año 2022.

Además de poder adquirir las colecciones musicales y películas en la tiendita de la Fundación, usted podrá acceder a su página cibernética info@PRpop.org, aquí podrá obtener mucha más información y ver la Agenda de las Actividades o se puede comunicar al teléfono 787-724-7165.

Si está de visita por el Viejo San Juan recomiendo llegar hasta la Fundación, está abierta los siete días de la semana de 9:00 a  6:00 en Calle Fortaleza 56. Estoy seguro le va a gustar.

Por este medio quiero felicitar a la Fundación, a todos los miembros de la Junta de Directores y su Director Ejecutivo por este gran logro.  Gracias.