
Por: Myrna L Landrón a su padre Manuel A Landrón
Porque cuando jugabas con nosotras cuatro al esconder en el cuarto
Y nos servías como puente entre dos camas para que
cruzaramos de una cama a la otra
Tu eras la poesia.
Porque cuando pequeña pasaba las horas contigo
Debajo de un camión pasándote las llaves de mecaniar…
Tu eras las poesia.
Porque nos dabas los besos en el “cocote”
Y tus abrazos nos dejaban el cuello torcido…
Tu eras la poesia.
Porque cantabas tangos en la ducha
Y bailabas con nosotras aunque no sabias cómo…
Tu eras la poesia.
Aunque a veces caminabas agarrado de las verjas
Cargado de dolor y penas…
Tu eras la poesia.
Porque el amor que siempre
Profesaste a Mami y a nosotras era enorme…
Tu eras la poesia.
A Mami le hice muchas,
a ti ninguna…
Porque tu eres mi poesia.